Escapada de fin de semana

Tras las nevadas de los últimos días, el plan que propongo de fin de semana es o bien visitar la estación de esquí de Javalambre (más cercana a la provincia de Valencia) o la de Valdelinares, pero haciendo una merecida parada en Mora de Rubielos, un pequeño pueblo medieval de la provincia de Teruel y lugar por el que pasa la ruta del Camino del Cid. Además de la belleza de los monumentos arquitectónicos que posee, el conjunto de todo el término llama la atención por su sorprendente variedad paisajística por donde hacer rutas de senderismo, si las condiciones climáticas lo permiten: gargantas en los Ríos Mijares y Rubielos, altas páramelas en las Muelas, masías por toda la zona. Todo ello compone una zona a visitar de gran riqueza.

Por lo tanto, la escapada une deporte, cultura, arquitectura, naturaleza, gastronomía… Vamos, lo tiene todo.

Lo primero que llama la atención cuando llegamos a Mora de Rubielos es el impresionanteCastillo gótico del siglo XIV, que se puede visitar de martes a viernes de 10:00 a 14:00 y de 17:00 a 19:30, los sábados de 10:00 a 14:00 y de 17:00 a 20:00 y los domingos de 10:00 a 14:00.

A parte del Castillo, lo que más me gusta es poder recorrer sus callejuelas e imaginarme historias de caballeros, reyes y princesas, ya que está repleto de casonas y palacetes, balcones y fachadas que evocan otras épocas. Sin lugar a dudas, es una de esas visitas obligadas, y es que en este pueblo no son sólo importantes el Castillo o la Excolegiata, sino también sus portales, que poblan la mayoría de sus calles, sus casas, sus plazas y sus ermitas.

Justo en la colina frente al castillo se pueden además contemplar parte de sus murallas y torreones, que nos pueden hacer una idea de la importancia que debió tener este pueblo hace más de 500 años.

Mora de Rubielos y Rubielos de Mora

Tras callejear y descubrir rinconcitos, seguro que el hambre empieza a hacer acto de presencia y más aún cuando sabemos lo que nos puede estar esperarando en el plato. Jamoncito D.O. de Teruel, o las famosas ‘delicias de Teruel (rebanadas de pan con tomate, aceite de oliva del Bajo Aragón, un poco de ajo y unas buenas lonchas de jamón) carnes a la brasa, ternasco, gazpacho de conejo, gachas, sopa de ajo, la sopa de Teruel… y si lo que se prefiere es algún plato de pescado también lo podrás encontrar, porque en esta zona es típico también la trucha, que se prepara frita, y el bacalao o abadejo.

 

Jamon de Teruel

Jamón de Teruel

 

 

Ternasco Aragones

Ternasco Aragones

 

 

Trucha aragonesa

Trucha aragonesa

Uno de los sitios recomendados donde comer es ‘El Riconcito’, un pequeño restaurante de comida casera y típica. Recomiendo reservar antes de ir, ya que es pequeño y se llena muy rápidamente. Otro es el ‘Restaurante Melanosporum’, que se encuentra dentro del recinto La Trufa Negra más info, y cuyos precios oscilan entre los 24 y los 51€, pero también tienen menús más económicos.

Después de la comilona y tras haber repuesto fuerzas, recomiendo visitar Rubielos de Mora, otro pequeño pueblo medieval que se encuentra a tan sólo 12km del anterior. Ambos son muy parecidos, pero a diferencia del anterior, su origen y explendor tuvo lugar gracias a comerciantes y artesanos de la Edad Media. Allá donde mires encontrarás un palacete medieval, de hecho, es una de las poblaciones con más casas señoriales de Aragón! Sin duda, otro lugar donde perderse e imaginarse historietas.

Mora de Rubielos y Rubielos de Mora_2